Tiempo Libre

Columna Teatro

Las reglas del buen vivir en la sociedad moderna

Bruno Bert

Jean-Luc Lagarde fue un escritor francés que más bien discretamente, al menos en el plano literario, vivió entre 1957 y 1995, cuando falleció a causa del Sida, que había contraído algunos años antes. Es decir, la mayoría de sus obras son de la década de los 80. Sin embargo, en lugar de navegar hacia el olvido, su nombre se fue potenciando y al cumplirse 50 años de su nacimiento hubo múltiples festejos que lo declaraban nada menos que un "autor canónico de la dramaturgia francesa". Ahora, lo trae a nosotros Germán Castillo con Las reglas del buen vivir en la sociedad moderna, material de 1989.

Bueno, para ser preciso, al parecer la base está en un Manual de buenas maneras de la baronesa Blanche Staffe, equivalente galo del Manual de Carreño, tan gustado, socorrido y burlado en nuestro medio en la primera mitad del siglo pasado, Lagarde reescribe teatralmente el tratado, volviéndolo un irónico comentario de las necesidades burguesas de seguridad frente a cualquier circunstancia, desde el nacimiento hasta la muerte. En lo personal no he leído otras obras suyas y ésta me parece hábil e ingeniosa, pero es claro que el peso de las virtudes del espectáculo no pasa tanto por el texto, como por la ductilidad de la actriz que lo asume a la manera de una conferencia, y del director, capaz de dar ritmos y puntuaciones que lo hagan no sólo llevadero sino incluso atractivo.

Ya había mencionado en críticas anteriores, que parece ser este un año donde se dan con especial fervor los monólogos. Aquí no es excepción, sólo que el formato –sentada la actriz detrás de un escritorio– acentúa aún más esto, dejando casi todo a la voz y las pequeñas acciones que caben a un conferenciante, volviendo este montaje un verdadero tour de force de lo que se suele llamar teatro de la palabra, a cargo de Ana María González, que compartirá en temporada el papel con Pilar Boliver y Bárbara Eibenschutz.

A lo largo del trabajo uno se pregunta por qué nos sentimos atraídos por alguien que narra las maneras de sentarse a una mesa, organizar un casamiento o llevar luto a la muerte de un pariente. Temas todos de apariencia intrascendente para nuestro tiempo y espacio social. Indudablemente son dos los factores base: por un lado, claro, la calidad narrativa de la actriz, y por otro la seducción que ejerce en nuestra cultura todo elemento retro, tanto de carácter formal como ideológico: la tensión entre lo conservador y lo contemporáneo, entre los valores recalcitrantes de un porfiriato revalorado y el caos que hoy tenemos en nuestro sistema de gustos, valores y apreciaciones.

Aquellos "caballeros" y "damas" tan seguros de sí en su destino manifiesto, tan hipócritas pero eficaces, tan explotadores y descarados se vuelven añorados por la pobreza de nuestro presente... como de alguna manera lo refleja la política nacional, se me ocurre. Así, Las reglas del buen vivir... con su sangrona ironía a cuestas, se vuelve como una clase maestra en más de un renglón, aunque en definitiva nos preguntemos qué otros materiales legó Lagarde para poder comparar en el futuro este juguete escénico, que con tanta habilidad ha montado Germán Castillo.

REGLAS PARA SOBREVIVIR EN UNA SOCIEDAD MODERNA, de Jean Luc Lagarde. Dir. Germán Castillo. Con Ana María González. Teatro Orientación. Centro Cultural del Bosque, Paseo de la Reforma y Campo Marte (Metro Auditorio), 5280-8771. Jueves y viernes, 20:00; sábado, 19:00; domingo, 18:00 horas. Loc. $150. Sistema Ticketmaster, 5325-9000. Adolescentes y adultos. Duración aproximada 75 mins. (Centro)