FICHA TÉCNICA



Título obra Medea

Autoría Eurípides

Notas de autoría Ángel María Garibay K. / traducción

Dirección José Sólé

Elenco Ofelia Guilmain, Wolf Ruvinskis, Antonio Medellín, Rafael Llamas, Socorro Avelar, José Carlos Ruiz, Mercedes Pascual

Escenografía Julio Prieto

Espacios teatrales Teatro Xola




Cómo citar Maria y Campos, Armando de. "Medea, de Eurípides en el teatro Xola". Novedades, 1964. Reseña Histórica del Teatro en México 2.0-2.1. Sistema de información de la crítica teatral, <criticateatral2021.org>



TRANSCRIPCIÓN CON FORMATO

Novedades

Columna El Teatro

Medea, de Eurípides en el teatro Xola

Armando de Maria y Campos

No se olvidará fácilmente la labor que el Instituto Méxicano del Seguro Social ha realizado en materia teatral. Una de sus últimas temporadas, la del teatro Xola, terminará, probablemente, con la reposición en nuestros escenarios de la tragedia de Eurípides, Medea, estrenada hacia 431 años a. C. y que obtuvo entonces un tercer premio. Nunca se le regateará interés, solemnidad, importancia y trascendencia a los espectáculos del IMSS. Áureo broche es la reposición de Medea, en versión de nuestro ilustre hombre de letras Ángel María Garibay K.

Nada nuevo se puede decir sobre Medea como no sea repetir las palabras de Garibay: "No hay en toda la tragedia griega conservada ninguna creación de tipos de mujer como la que hallamos en las tragedias de Eurípides. Majestuosa y variada. Una Medea que nadie ha reproducido, a pesar de los esfuerzos de Séneca". Para nosotros, los mexicanos, murieron todas las versiones de Medea anteriores a ésta del padre Garibay, cuyo tema es bien conocido de nuestros lectores porque esta tragedia ha sido representada entre nosotros varias veces en distintas versiones. Queda, pues, un breve comentario sobre su presentación e interpretación.

La presentación por parte del Patronato para la Operación de los Teatros del IMSS es irreprochable y sobria. Un portal de la casa de Medea al fondo y dos rampas laterales. No necesitó Julio Prieto de más elementos decorativos para dar la impresión del lugar en que está situada la acción. Luces; estupendos fondos musicales, vestuario propio e indiscutible. En cuanto a la dirección –de José Solé– la novedad de un animado, ágil, impresionante juego de movimientos con las doce figuras que forman al Coro, cada una de ellas, con un báculo y en el asta de éste la máscara tradicional de la tragedia. El solo movimiento del Coro es por si un espectáculo.

Ofelia Guilmain ha sido consagrada como actriz dramática. Lo es, sin duda, sustentando su calidad dramática en su voz abaritonada, enriquecida con notas graves de bajo profundo. Tal vez sus agudos no sean felices, y esto le resta emoción en los instantes de la verdadera altura trágica. Ofelia entra en el personaje antes de salir a escena, y da la impresión de que con su voz y su acento rico en matices adelanta la tragedia. Dueña de un soberbio oficio de actriz y de memoria prodigiosa, se encuentra en su elemento, en aguas turbulentas de la tragedia de Medea. Fue largamente ovacionada. Muy sobrio el Jasón de Wolf Ruvinski, y no menos digno el Egeo, rey de Atenas, de Antonio Medellín y el Creón, rey de Corinto, de Rafael Llamas. Los dos fueron aplaudidos al lado de la señora Guilmain. En un segundo término muy estimable actuaron Socorro Avelar, José Carlos Ruiz y Mercedes Pascual, cabeza del Coro, como Corifeo. El Coro está integrado por una nómina de jóvenes actrices seleccionadas entre las mejores del equipo teatral de México. Una gran velada para los amantes del teatro fue las primera representación de Medea, de Eurípides y Garibay.