El Día

Columna Se alza el telón

Premios de la Asociación Mexicana de Críticos de Teatro

Malkah Rabell

Después de varias sesiones de discusiones previas, durante las cuales más o menos se formaron las "ternas", el miércoles 17 del presente la Asociación Mexicana de Críticos se reunió para elegir a los premiados definitivos.

Por lo general, en años anteriores, los premios o bien me llenaban de entusiasmo, o bien me hundían en la desesperación, y casi siempre me embargaba una sensación de tristeza por todo lo "no dicho", lo "no premiado", lo "no compensado". Siempre se me hacía que nuestras elecciones se hallaban llenas de errores, lo que no dejaba de ser humano. Esta vez nada me colmó de entusiasmo, pero tampoco de indignación. Fue como una especie de indiferencia ante el deber cumplido conscientemente, pero sin mucho corazón. Creo que las elecciones fueron más o menos (dentro de lo humanamente posible) justificadas, y los premios otorgados con una visión limpia de pasiones malsanas o de intereses personales. Fue un año rico en cantidad y pobre en calidad, más dentro de esa pobreza hubo destellos de brillantez artística, y creo que sin llegar a la justicia suprema –que ni a Dios le es dado– se puede considerar que lo más destacado del año fue señalado.

Y he aquí como han sido distribuidos los premios.

Premio al mejor vestuario: Guillermo Barclay por La Marquesa de Sade.

Música: Al conjunto Al Universo durante la representación Adán y Eva.

Premio al mejor espectáculo Infantil: Alicia en el País de las Maravillas, dirigido por Enrique Alonso.

Premio al mejor Escenógrafo: Guillermo Barclay por No se sabe cómo.

Premio al mejor Teatro de Búsqueda: (Por el grupo) In Memorian.

Premio ala Actuación Juvenil: César Bono en La isla.

Premio de Revelación Femenina: Mercedes de la Cruz por su interpretación en Las cartas de Mozart.

Premio a la Co-Actuación Femenina: Alicia Palacios por su estupenda intervención en La Marquesa de Sade.

Premio a la Co-Actuación Masculina: a nuestro simpático y excelente actor Ángel Garasa por su intervención en Ahí va la novia.

El Premio a la mejor dirección del año: a Manuel Montoro por su puesta en escena de No se sabe cómo de Pirandello, en el Teatro de la Universidad.

Premio al Primer Actor del Año: Sergio Jiménez por su interpretación en La isla.

Premio a la Primera Actriz: Ofelia Guilmáin. por su intervención en el trágico papel de Medea de Eurípides.

Premio a la mejor obra nacional del año: Nada como el piso 16, de Maruxa Villalta.

Premio al Teatro Extranjero: la Compañía María Guerrero de España.

Gran Premio de Honor: Héctor Mendoza, por su labor en el Departamento de Teatro de la Universidad, y de toda una vida en pro de un teatro de alto nivel en México.

COMO PREMIOS ESPECIALES

La mejor producción musical: Jesucristo Superestrella.

Premio a un actor cantante: Jorge Ahraham por su espléndida actuación en el Judas de Jesucristo Superestrella.

Indudablemente no están todos los que lo merecen. Pero acaso ¿en algún concurso universal están todos los que deberían estar?